martes, 7 de octubre de 2014

¡No me diga! Una disertación sin oficio ni beneficio.

La idea "exótica" del amor cortés que se propone en los libros de caballerías o mucho antes, en los libros de la tradición literaria medieval española hace que me cueste mucho trabajo lograr actualizarla en el contexto en el que nos encontramos. El porqué de esta dificultad radica en la singularidad de las relaciones de hoy en día; si bien muchas veces alguna de ellas raya en el idilio perfecto, la mayoría se centra en la locura de la posmodernidad. ¿En la actualidad siguen habiendo justas? Sí, por los favores de la amada. ¿Sigue habiendo idealización amorosa? Sí, pero porque a uno le gusta ser pendejo y nada más, no porque la 'dama' le corresponda o siquiera le de esperanzas. Se ha perdido toda la tradición de conservar la honra y los favores amorosos por medio de los méritos 'bélicos' que algún avezado realice, ahora se siguen otorgando dichos favores de una manera "deshonrosa", no de una manera moralinamente hablando, si no, de que el amor ya no es lo que era antes, las damas ya no son damas y los caballeros dejaron de serlo (sí, claro. Ajá)

 Lo único que creo que conservamos de esa bella tradición caballeresca-medieval (que incluso es mucho más antigua que esos referentes) es que si a uno le quieren pedalear la bicicleta, lo único que se puede hacer para recuperarse de la afrenta es batirse en duelo, ya sea con los puños o con las benditas palabras que aveces duelen más que unos chingadazos bien dados. 

Momentos musicales IV



"Y si la noche ya no tiene nada que decirte, puedes ir a deshacer la cadena de la tumba". Danustza Bytniewski.

miércoles, 9 de enero de 2013

De amores y desamores.

Como ven, he regresado (una vez más, después de las 3 veces anteriores en las que ya lo había hecho) y como siempre, he resuelto quejarme por este medio, bajo la máscara del anonimato totalmente violable y casi inexistente:
 
 Resulta que conocí a cierta persona hace casi 3 meses y hemos estado saliendo de manera constante, sólo que ahora todo ha "cambiado" de repente y sin aviso; si bien no teníamos una relación más allá, (y tampoco quiero una) se me ha hecho muy extraño, tal vez sea paranoia mía, eso seguro pero presiento que algo me oculta y las personas que me ocultan algo que se supone debo saber no me gustan y sobre todo, porque se supone que me haría saber cualquier cambio de planes de acuerdo al trato al que habíamos llegado. ¿usted qué opina?
No me gusta presionar a nadie, pero si llega el momento de tomar una decisión haré que la tome, no importa si me beneficia o me perjudica, eso me da igual, lo que me importa es la sinceridad.
 
 

viernes, 21 de diciembre de 2012

El fin.

Como verán llegó el "Fin del mundo", Chabelo sigue vivo y nosotros también. ¿Acaso habrá catafixiado a los mayas el final por una sala de Muebles Troncoso? Piénsenlo...

martes, 25 de septiembre de 2012

Piropos guarros. Parte II


Hoy que iba caminando por la calle, camino a la facultad (la mayoría de mis escritos comienzan así, verdad... se nota que no tengo vida) pasé cerca de una obra en construcción y empecé a escuchar el clásico: "tsss, tsss, mamacita, en esa cola sí me formo" y esta vez, en vez de ignorar la injuria decidí contestarle cortésmente: "Sí pendejo, esta cola es para ir a la verga"; creo que no le hizo mucha gracia... En fin, esto me inspiró para hacer la segunda parte de los piropos más guarros (revise aquí la primera entrega de lo bonito que es el lenguaje) que he escuchado, que me han dicho y que les han dicho a mis amigas y claro, amigos, por que las mujeres también podemos tener boca de cloaca…

Y comenzamos con las primeras profanaciones lingüísticas propias de un… bueno, a estas alturas ya nadie se salva de pasar por una situación así:

 - Esa de Rojo...
- Mi reina, cómo quisiera ser aceituna para estar en tu tamal… (jajaja)
- Señorita, ¿cuánto cuesta el osito que trae entre sus piernas?
- Si tus pelos fueran lija, ya tendría la lengua plana.
- Te lo mamo después de ‘miar’ y si escupo pierdo.
- Con esa pepa haz de mear champaña.
- Mamacita, quisiera ser albañil, para resanarte la rajadura.
- Me gustaría ser agua podrida para estar todo el día en tu zanja.
- Quisiera ser mosca de charco para pararme en tu caca… (Este sí me dio asco)
-Si yo fuera plomero, te destaparía el agujero.
- Qué bonitas piernas.... ¿A qué hora abren?
- Me gustaría que fueses un pollo, pa’ meterte el palo por el culo y ponerte a sudar.
- No busques más el tocador de damas: Soy yo.
- Tus ojos son como mis calzoncillos: Negros y rasgados.
- Si Dios juntó los ríos, ¿por qué no juntar tus pelos y los míos?
- Mamacita, me hago un sope con tu chorrillo.
- Mi’jita si fuera vampiro te chuparía hasta la regla.
- Si el rojo es el color de la pasión... ¡bañarme con tu menstruación!
- En esta noche tan fría, yo te ofrezco mi estufa, no tiene ni pilas ni cables, pero igualmente se enchufa.
- Nena corazón de alpaca, si no me prestas el de hacer chis, préstame el de hacer caca.
- Quisiera ser azúcar para empolvarte la rosca.
- Si eres virgen, te la meto de rodillas.
- Mamacita, dichoso el clavo que ponche esas llantitas.
 
Esa muestra de cultura popular es el "mal" que nos aqueja día a día en nuestra querida Ciudad de México y sus al rededores, a decir verdad me parece muy gracioso (obviamente si no me los dicen a mí) ... y a usted, ¿qué es lo más guarro que le han dicho? Ponga su queja.

domingo, 23 de septiembre de 2012

Me gusta todo de ti (pero Tú no)


Recuerdos de Oaxaca.

En la tarde mientras estudiaba para mi examen de latín con un amigo (que adoro, por cierto [aunque a veces me desespera]), me puse a recordar el día que me fui de casa dejándole una nota a E. diciéndole que me iba de paseo a Oaxaca, que no se enojara y que le llamaría en cuanto llegara (estaba furioso, pero con un "mi amorcito, no te enojes, chiquito" todo fue calma y paz); haciendo memoria de esa aventura me llegó a la cabeza una cancioncita que desde la primera vez que la escuché, me encantó y que no puedo sacarla de mi cabecita loca. He aquí ese son.
 
"Tú pisas mi corazon ¡Ay Paulina!"